Elegir un tipo de caseta u otro dependerá básicamente del uso que le vayas a dar.
Las casetas de madera son decorativas y si se tratan adecuadamente son bastante duraderas. Las de metal tienen una estructura ligera, son resistentes y fáciles de mantener y, las de plástico, no se oxidan ni se descomponen.
Una vez elegida la caseta que vas a instalar deberás preveer la construcción de una solera, si tienen anclajes o no, en definitiva, seguir las instrucciones que te da el fabricante a la hora de instalarla.
El lugar más idóneo para instalarlas será un sitio plano, con buen drenaje y con espacio suficiente para que las personas que vayan a utilizarla circulen a su alrededor.
El suelo donde se coloque la caseta deberá ser compacto y estar nivelado para que los elementos de la estructura no sufran sobrecargas.
Casi todas las casetas, sean del tipo que sean tienen elementos básicos cómo son el tejado, vigas, techo, paredes laterales y puerta, ventanas (a veces) y todo lo necesario para ensamblar las piezas.