Para airear el césped, que consiste en realizar agujeros en la tierra que permiten que se oxigene y que los nutrientes vitales se introduzcan en ella, hay muchas herramientas en el mercado.
Si tu jardín no es muy grande puedes utilizar métodos tradicionales como la horca de mano con cuatro púas o unas plantillas con puntas que se fijan en los pies. Si tienes un jardín grande igual es necesario que compres o alquiles un aireador o que realice el trabajo un profesional.
Gracias a esta práctica las raíces del césped respirarán mejor y asimilarán mejor el abono que le proporcionamos. Evitamos además que la tierra se endurezca y la delgadez de las hojas.
Antes de airear el césped deberás eliminar y rastrillar los desechos que pueda tener el jardín y cortar el césped. También es importante que un día antes la tierra sea regada para ablandar la tierra que esté más dura.
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