Durante estos días de otoño podremos encontrar frutos secos en nuestra despensa. Los frutos secos son propios de esta estación y maduran y se recogen durante la misma.
Los frutos del otoño los podemos dividir en: Frutos secos y Frutos carnosos. Son frutos secos las avellanas, las nueces, las castañas, las bellotas,... Son frutos carnosos las uvas, las naranjas, las peras, las manzanas, los limones, las piñas,... Todos son una buena fuente de energía y ricos en antioxidantes.
La castaña es un fruto seco propio del otoño y que se puede conservar con mucha facilidad, por lo que se pueden encontrar hasta finales de invierno. Las castañas se pueden comer crudas, hervidas, asadas o dulces.