viernes, 10 de enero de 2014

Las sabinas de El Hierro

La Sabina es un arbusto resinoso de hasta 8 metros, de hoja perenne, longero, de profundas raíces y que crece incluso en sustratos rocosos. La corteza es pardo grisácea o […]
Buenos días,

Hoy queremos hablaros de la Sabina Canaria (Juniperus Turbinata Canariensis), que junto a la palmera canaria, el Drago o el Mocán es uno de los elementos vegetales fundamentales de los bosques termófilos de Canarias. 


Aunque antiguamente llegaron a cubrir grandes extensiones de las medianías, hoy en día podemos encontrar sabinas en algunas de las islas occidentales, como Tenerife, La Palma o La Gomera, pero uno de los reductos más importantes es, sin duda, la isla de El Hierro.

Este sabinar se encuentra en La Dehesa y está catalogado como Espacio Natural Protegido. Allí las sabinas se retuercen por efecto de los vientos alisios, creando un paisaje único de espectacular e impresionante belleza, con formas retorcidas imposibles, llegando incluso a tocar el suelo con sus ramas. 

Las sabinas pueden llegar a medir 8 metros de altura y tienen hojas verdes y perennes todo el año, creciendo en los lugares más inhóspitos que podamos pensar. 

Sus frutos son globosos y carnosos de unos 10 milímetros de diámetro, que llevan de 4 a 10 semillas con una cubierta muy dura que hace díficil la germinación. Tiene la copa oval o redondeada, muy ramosa, con follaje muy denso, parecido al del ciprés, formado por ramas de color pardo-rojizo; ramillas redondeadas y muy finas, de 1 mm de diámetro, totalmente cubiertas de hojitas escuamiformes.

Los conos masculinos y femeninos se producen en la misma planta, en raras ocasiones van en distinto pie de planta.

Florece a finales de invierno o en primavera y las arcéstidas maduran al segundo año, son de color verde o verde-leonado, al principio y al madurar de color rojizo y lustrosos.

Como toda la familia, es una planta muy variable y con muchas variedades y subespecies.

La madera es compacta, de grano fino, muy resistente, de color pardo-amarillento o rojizo y muy aromática; es excelente para fabricar carbón, lo que sin duda ha motivado, la escasez de ejemplares bien desarrollados. A veces se cultiva como ornamental.

Fotos y Fuentes: pincha aquí

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